La Semana Europea de la Prevención
de Residuos (SEPR), coordinada por Cogersa en Asturias, se celebró del 16 al 24
de noviembre de 2024 bajo el lema "El buen gusto no tiene desperdicio".
Esta campaña anual tiene como objetivo concienciar sobre la reducción de
residuos y promover prácticas sostenibles en la producción y el consumo. En
esta edición, se puso un especial énfasis en el desperdicio alimentario, un
problema significativo tanto en Asturias como en toda España. Se estima que
anualmente, alrededor de 15.200 toneladas de alimentos y bebidas en buen estado
terminan en la basura en Asturias, mientras que a nivel nacional, se
desperdician aproximadamente 1,17 millones de toneladas de comida, lo que
equivale a un promedio de 65,5 kilos por hogar al año.
Cogersa hace un llamado a la
sociedad asturiana para unir esfuerzos en la reducción de este despilfarro.
Para abordar este desafío, se han organizado 186 acciones que involucraron a
476 centros educativos, asociaciones, empresas y entidades públicas. Entre
estas iniciativas destacó la colaboración con el Banco de Alimentos de
Asturias, que incluyó un webinar liderado por su secretario Juan José Cima, dirigido
a las escuelas de hostelería para mostrar el trabajo diario del Banco en la
lucha contra el desperdicio.
La formación en prácticas de
economía circular y concienciación ambiental es crucial para mejorar la
sostenibilidad en el sector hostelero. Promover la adopción de prácticas que
reduzcan el desperdicio alimentario y fomentar la colaboración entre el sector
hostelero y organizaciones benéficas son pasos fundamentales para lograr un
impacto positivo. Es importante tener en cuenta que los asturianos lideran el
consumo y gasto de alimentos en España, con una compra media de 709 kilos y
litros por persona al año y un gasto medio de 1.678,9 euros. Sin embargo,
también se enfrenta a desafíos significativos, ya que aproximadamente un 24,9%
de los hogares asturianos (alrededor de 113.000) experimenta algún tipo de
inseguridad alimentaria.
La SEPR 2024 en Asturias no solo
aborda el problema del desperdicio alimentario, sino que también invitó a
reflexionar sobre nuestros patrones de consumo y producción. La participación
activa de toda la sociedad es esencial para construir un futuro más sostenible
y responsable con nuestro entorno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario